Nasca sigue siendo uno de los atractivos más enigmáticos del mundo por la particularidad de sus figuras conocidas como las ‘Líneas de Nasca’, que sólo pueden verse a plenitud desde la altura, en uno de los desiertos más áridos en Perú.
Ubicado en la provincia de Nasca, región de Ica, las Líneas de Nasca son un destino reconocido patrimonio mundial de la humanidad por la Unesco. Aunque fueron descubiertas en 1937, y cada día las investigaciones arrojan nuevos datos, hasta hoy sigue siendo un misterio el cómo, cuándo y por qué fueron dibujadas.
Según Johny Isla, arqueólogo peruano, algunas teorías indican que estos geoglifos fueron usados por la cultura Nasca como referente astronómico; otras, afirman que se trata de centros de adoración o que juntas forman un gigantesco calendario. Las investigaciones más recientes señalan que fueron ofrendas a los dioses para atraer la lluvia a una de las zonas más secas del mundo: las pampas de Jumana, en el desierto de Nasca. Incluso la hipótesis del científico suizo Erich Von Däniken señalaba que las figuras fueron hechas por seres de otro planeta.
Expertos señalan que las Líneas de Nasca fueron creadas entre los años 500 a. C. y 500 d. C., y a pesar de tener más de un milenio a cuestas, muchos de los geoglifos no han sido modificados por la naturaleza y tienen un buen estado de preservación debido a su ubicación en un terreno con clima privilegiado de pocas lluvias, y resguardado de los vientos gracias a las grandes colinas de arena que las rodean. El cóndor, el mono y la araña, son algunas de las casi 800 figuras encontradas, -hechas de un solo trazo-; algunas alcanzan los 300 metros de extensión, lo que hace de este lugar uno de los destinos más sorprendentes, naturales y enigmáticos del Perú.
¿Cómo llegar?
Para llegar a las Líneas de Nasca, desde Lima, la capital de Perú, debe tomar un bus hasta Ica, (cuatro horas, aproximadamente). Para que el trayecto no sea cansado le recomendamos visitar Ica, una ciudad con una gastronomía regional deliciosa y cuna del pisco, la bebida bandera del Perú. Desde ahí, continuar su trayecto por carretera o tomar los servicios de sobrevuelos.
Otra alternativa desde Lima, es hacer un solo recorrido en auto particular: serán un poco más de seis horas por la carretera Panamericana Sur.
¿Cómo divirsar estos geoglifos?
El arqueólogo Islas señala: “Hay que tener en cuenta que estos geoglifos son considerados paisajes culturales, no son un cementerio o huaca, son lugares integrados al paisaje, por lo que su visualización tiene que ser entendida para observar todo el entorno, sus ríos y montañas”.
La primera opción para tener un amplio panorama de la zona y visualizar todo el paisaje de manera integral, es contratar un sobrevuelo desde los aeródromos ubicados en Ica, Nasca y Pisco. Se puede reservar online con días de anticipación.
La segunda es subir a los miradores de 12 metros de altura habilitados al borde de la carretera Panamericana. Durante el recorrido de este trecho de la vía es posible adquirir y probar los productos que venden los pobladores del lugar, y tener un contacto más cercano.
Un destino que sigue sorprendiendo
Después de décadas del descubrimiento de las Líneas de Nasca, el trabajo de los investigadores sigue dando frutos. En plena pandemia, a finales del año 2020 fue hallada la figura de un felino; mide 37 metros de largo y, según sus rasgos estilísticos, haría parte de la época Paracas Tardío.
“De este modo, aun en tiempos de pandemia, personal del Ministerio de Cultura viene contribuyendo con la investigación, la conservación y el desarrollo turístico de la región, en particular de la provincia de Nasca”, informó en su momento el Ministerio de Cultura de Perú.
El estudio y conservación de estos mensajes milenarios, fueron impulsados -en su mayoría- por la arqueóloga alemana Maria Reiche, cuya historia ha sido inspiración para la película ‘Lady Nazca’, producción que será rodada en este lugar para evocar la vida de esta joven que, buscando su camino llega al desierto peruano, descubriendo las enigmáticas Líneas de Nasca.
Otras actividades
En este desierto, el turista podrá recorrer en las dunas y los vastos paisajes, además de hacer varias paradas en sitios arqueológicos. Pero esto no es todo, otro tour lo llevará a través del verdor de las zonas de cultivo para conocer la vida rural y visitar los acueductos de Cantalloc.
Otra de las experiencias es un recorrido guiado por la ciudad para conocer los cuatro principales sitios arqueológicos que cuentan la forma de vida y costumbres de los Nasca.
Este destino sigue siendo uno de los misterios del mundo a la vista de todo el que quiera conocerlo. ¿Quién las hizo? ¿Cómo fueron hechas? ¿Qué función tenían?, son preguntas obligadas para todo aquel que se deje sorprender con este espectáculo natural considerado un tesoro arqueológico de Perú.
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