El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, inauguró el pasado lunes el nuevo Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA), el cual servirá a la Ciudad de México. Sin embargo, desde su origen hasta su inauguración el proyecto ha generado grandes disputas y controversias, entre retrasos y baja ocupación.
Desde el inicio de su mandato, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, catalogó la construcción del nuevo Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA) como una de sus obras de infraestructura insignia para la capital mexicana, al ser llamado por él como “el mejor aeropuerto de México y uno de los mejores del mundo”. Desde ese momento, el proyecto ha generado grandes polémicas.
El aeropuerto se encuentra ubicado a unos 45 kilómetros al norte de la capital, en el contiguo Estado de México, es el primero de los principales proyectos de infraestructura del mandatario que se inaugura y tiene como objetivo aliviar la congestión en el Aeropuerto Internacional de Ciudad de México (AICM).
“Misión cumplida. Es la suma de voluntades, la suma de esfuerzos lo que hizo posible esta gran obra. Ya está terminado y ya se va a entregar al pueblo de México, porque es una obra del pueblo, construida por trabajadores en beneficio del pueblo, de la nación”, expresó López durante el acto de apertura el pasado 21 de marzo.
El Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles en su primera etapa tiene una capacidad para recibir 19,5 millones de pasajeros al año y registrar 119.000 operaciones año. Su construcción total será de 384.128 metros cuadrados y albergará tres pistas.
Un polémico origen
Las disputas de la construcción iniciaron porque el AIFA reemplaza desde 2018 al Nuevo Aeropuerto Internacional de México (NAIM), una obra moderna del expresidente Enrique Peña Nieto (2012-2018) que a su vez generaba críticas pues se construía sobre el lago de Texcoco y denunciaban contratos de corrupción.
Posteriormente, la actual presidencia convocó a una consulta electoral para cancelar el proyecto de NAIM. Con una participación del 1,23% del total de la población mexicana, el proyecto aeroportuario quedo cancelado, una obra de 13.300 millones de dólares y con un 30% de avance.
Al respecto, el secretario de Turismo, Miguel Torruco Marqués, reiteró que el proyecto aeroportuario que se construía en Texcoco representaba un costo de más del doble de lo que implicó el AIFA, además afectaba el vaso regulador que capta el agua de lluvias del Valle de México, y ahora, 14 mil hectáreas serán rescatadas en beneficio del medio ambiente y las especies de flora y fauna del lugar.
De acuerdo con el gobierno de Obrador, el AIFA tiene un costo oficial de 75.000 millones de pesos, cerca de 3600 millones de dólares. Sin embargo, una reciente investigación del diario El Universal, calculó que el precio es de 116.000 millones de pesos mexicanos, más de 5.600 millones de dólares.
La controversia continúa
Las polémicas tras la inauguración del aeropuerto continúan, entre retrasos, baja ocupación y confusión en las vías. Uno de los casos es del primer vuelo de Aeroméxico, el cual comenzó con 20 minutos de retraso. Además, según han denunciado varios pasajeros a través de redes sociales el itinerario registraba una baja ocupación. De igual manera, Volaris registró una baja ocupación en los vuelos operados desde esta terminal aérea.
