Con la reciente reapertura, continúa la expansión del turismo chino en el mundo. Entre los países latinoamericanos, Cuba es un destino de interés para los viajeros asiáticos, respaldado por los vínculos entre ambas naciones.

El turismo emisor chino está cobrando creciente importancia en América Latina, donde tiene especiales vínculos con Cuba, en una época en que la actividad turística atraviesa profundas transformaciones.

Un panorama publicado por el investigador José Luis Perelló en la web El economista de Cuba recordó que la región Asia-Pacífico abarca más de 4000 millones de personas (60 % de la población mundial) y China en particular era antes de la pandemia el primer emisor a nivel global, tanto en número de turistas como en el gasto realizado en sus viajes internacionales.

En números absolutos, los viajes de turistas chinos a América Latina y el Caribe aún están lejos de los realizados a Asia o Europa, pero los últimos años marcan una tendencia al crecimiento.

Perelló cita estudios de mercado efectuados por consultoras chinas y datos de agencias turísticas, que constatan el interés de los viajeros asiáticos y su voluntad de descubrir nuevos destinos.

Por tal motivo —indica— los destinos caribeños deberían aprovechar el nuevo escenario pospandemia e implementar acciones de promoción específicas para el turismo chino. Entre ellos se destacan México, Panamá y Cuba, que deberían trabajar en la creación de medidas regionales para la promoción conjunta como multidestino turístico.

“Como parte de la estrategia cubana para fomentar el desarrollo del mercado chino, en 2021 el Ministerio de Turismo de la isla (Mintur) y la Academia de Turismo de China firmaron un memorando de entendimiento en materia de cooperación turística que abarca programas académicos, investigación y capacitación”, detalla el artículo publicado en El economista de Cuba.

Recientemente, además, grupos de tour operadores y agentes de viajes chinos visitaron Cuba con el objetivo acercarse lo más posible a las potencialidades de la industria de los viajes de la isla.

Este año el sector turístico cubano se propone recibir a 3,5 millones de vacacionistas, una cifra muy por encima de los 1,7 millones de 2022, pero aún por debajo de los cuatro millones alcanzados en 2019.