La medida, que impedirá el acceso de taxistas informales a la aeroestación de la capital, ya rige en el aeropuerto Jorge Chávez con el objetivo de evitar el hostigamiento a los pasajeros.
Desde el 1º de marzo el Aeropuerto Internacional Jorge Chávez (AIJC) solo permite el ingreso de taxistas solicitados por los pasajeros.
Según explicó el Organismo Supervisor de la Inversión en Infraestructura de Uso Público (Ositrán), las nuevas reglas generales para el uso de la playa de estacionamiento en el Aeropuerto Internacional Jorge Chávez “buscan garantizar la seguridad de todos los usuarios y ordenar el uso de la playa de estacionamiento del terminal, evitando situaciones de riesgo a la integridad física de las personas y la congestión vehicular”.
La medida establece normas de conducta y reglas que deben ser cumplidas para mejorar las condiciones de eficiencia y calidad de servicios para los miles de pasajeros que transitan diariamente por la playa de estacionamiento del principal aeropuerto del país.
El Organismo Supervisor subrayó que no se impide a los taxistas ofrecer sus servicios, sino que estos deben ser brindados de manera ordenada y sin afectar a los usuarios. Por lo tanto, el acceso de taxis está permitido para dejar y recoger pasajeros cuando el usuario lo haya solicitado.
Lo que se busca es frenar el ofrecimiento del servicio de taxi a viva voz y que no se obstruya, con el vehículo o con cualquier otro medio, el tránsito peatonal desde o hacia el terminal de pasajeros.
Lima Airport Partners, concesionaria del AIJC, informó que habrá un período de “Marcha Blanca” de 60 días calendario a partir del 1º de marzo. Durante este tiempo se informará y sensibilizará a los usuarios sobre las nuevas reglas para el uso de la playa de estacionamiento.
Los taxistas podrán hacer uso de la vía libre para dejar pasajeros o para ingresar a recogerlos, pero acreditando que cuentan con una solicitud del servicio. El concesionario aceptará cualquier forma de acreditación que le proporcione el usuario: Whatsapp, mensaje de texto, la declaración del taxista en caso el pedido haya sido formulado a través de una llamada telefónica o de manera presencial.