Una nueva reglamentación se aplicará sobre la oferta publicada en plataformas como Airbnb. Es una medida que ofrece mayor seguridad a los huéspedes y sus anfitriones y que aporta más equidad con la hotelería.
Al igual que en otras grandes capitales del mundo, Buenos Aires regulariza la oferta de alquileres temporarios. Se busca así proteger a los turistas y sus anfitriones, evitar posibles estafas y aportar más igualdad con la hotelería convencional.
En consonancia con los anuncios que viene realizando el Jefe de Gobierno de la Ciudad, Jorge Macri, se simplificaron los requisitos y los procedimientos para que los anfitriones puedan inscribirse gratuitamente y de forma más ágil en el registro de Alquileres Temporarios con fines turísticos. Este trámite es a partir de ahora obligatorio para que las unidades puedan permanecer en los sitios de tipo Airbnb o Booking. Los propietarios tienen un plazo de 180 días para completarlo.
“Como una de las grandes capitales de la región y del mundo, nuestro objetivo es construir un destino cada vez más atractivo. El caso de los alquileres temporarios turísticos es un fenómeno que existe a nivel mundial y en Buenos Aires buscamos la forma de incorporarlos a la oferta formal. Por eso, tomamos el desafío de establecer pautas más justas para que todos los tipos de hospedaje compitan de forma más equitativa”, afirmó Valentín Díaz Gilligan, presidente del Ente de Turismo de la Ciudad de Buenos Aires.
En la reunión organizada en la sede del Gobierno de la Ciudad participaron también Karina Perticone, directora ejecutiva de Visit Buenos Aires; Germán Krivocapich, titular de la AGIP; y Eugenia Wehbe, directora general de Desarrollo Turístico del Ente de Turismo de la ciudad.
Valentín Díaz Gilligan precisó que “hoy el mercado de alquileres temporarios porteño tiene aproximadamente 20.000 unidades. Es un volumen muy relevante si pensamos que Buenos Aires cuenta con 60.000 camas hoteleras. Son modelos complementarios que no siempre apuntan al mismo perfil de turista”. El funcionario agregó que según un estudio reciente de la Universidad Torcuato Di Tella, en el tercer trimestre del 2023 había alrededor de 20.000 unidades publicadas en la plataforma Airbnb. “Esto representa solamente un 1,26 % del total de las viviendas particulares que existen en la Ciudad y el 9,18 % de las viviendas deshabitadas”.
Además de pedir el número de inscripción al registro para autorizar las publicaciones, las plataformas digitales pasan a ser agentes de retención y percepción del Derecho de Uso Urbano, tal como lo detalla la resolución 2025-6 de AGIP publicada el 8 de enero de 2025. Esta tasa que es de US$ 1,50 por persona (mayor de 12 años) y por noche ya se percibe por medio de los hoteles. La pagan los visitantes que no tienen residencia en el país. El dinero recaudado por esta vía se destina a la promoción turística internacional de la Ciudad, a través de Visit Buenos Aires, el ente público no estatal que fue creado para ese fin.
En conclusión a la rueda de prensa, Valentín Díaz Gilligan puntualizó: “Les hemos dado 180 días a las plataformas para la regularización de todo el stock de viviendas publicadas. Creemos que es un plazo razonable. Después de eso, vamos a realizar controles más estrictos. Pero les puedo comentar que hemos encontrado muy buena receptividad tanto de Airbnb como de Booking. Este tipo de regulación es un tema complejo a nivel global, y en muchas ciudades han tomado medidas drásticas, como la prohibición total en Nueva York o Barcelona. No es el camino que queremos seguir en Buenos Aires, pero sí aspiramos a plantear reglas claras.”
