Creada en 1999 en México por el Grupo Piñero, la fundación busca llevar a cabo proyectos de conservación, mantenimiento y mejora de recursos naturales, así como concienciar sobre la importancia del medio ambiente.
La Fundación Eco-Bahía, que el Grupo Piñero fundó en México sobre el umbral de este siglo, tiene en marcha programas de recuperación y manejo de fauna, fomento de flora nativa y endémica, conservación de recursos marinos, protección de arrecife coralino y mantenimiento de áreas protegidas.
Estos proyectos se replicarán ahora en República Dominicana, uno de los mercados más importantes de Grupo Piñero, donde cuenta con 13 resorts.
En materia de concienciación, la actividad de la fundación ha ido evolucionando hacia acciones educativas y de sensibilización ambiental con comunidades locales, colegios, colaboradores, clientes y propietarios de los desarrollos turísticos y residenciales.
La Fundación ya está empezando a trabajar en la restauración del mirador de ballenas de Punta Balandra junto con el Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales. También contribuye con la entrega de contenedores para separación de residuos en escuelas del proyecto Samaná Biodiverso.
Entre sus objetivos para 2023 sobresalen la inauguración de centros de compostaje en varias localizaciones y acuerdos de cooperación para propulsar su iniciativa de educación ambiental, así como el inicio del programa de restauración de ecosistemas.
Los resorts de Grupo Piñero en República Dominicana se levantan en una amplia zona de capital natural, con una gran diversidad de flora y fauna protegida gracias a la labor de la Fundación. Ahora, con su expansión, el grupo hotelero busca “inspirar un cambio en el sector, promoviendo un mejor entendimiento de la importancia del cuidado del medio ambiente y fomentando la implementación de prácticas sostenibles en el capital natural en el que opera”.