La Comisión de Atención a los Servicios de la Asamblea Nacional debatió sobre el desempeño del sector turístico en el año actual, con la participación del primer ministro Manuel Marrero Cruz y el ministro de Turismo, Juan Carlos García Granda.
Con alrededor de 2.450.000 visitantes hasta octubre de este año y un crecimiento del 50 % con respecto a 2022, el turismo en Cuba se ubicó por debajo de los tres millones de visitantes proyectados para 2023, pero aspira a lograr ese objetivo el año próximo.
Entre los obstáculos para el crecimiento, según se indicó, se encuentran la falta de un enfoque sistémico para la gestión integrada del destino, y restricciones en las formas de pago de servicios y ofertas.
Sin embargo países emisores relevantes, como Canadá, proyectan alcanzar un millón de visitantes este año. El mercado ruso sigue en crecimiento, mientras que América Latina y el Caribe representan el 9 % de la estructura de mercados y experimentan un crecimiento del 75 % respecto al año anterior.
Entre las principales acciones comerciales para aumentar el turismo destacan la incorporación de nuevos turoperadores, el incremento de las ventas en línea, el aumento de la participación en ferias y bolsas comerciales, y la implementación de acciones centradas en la economía circular.
“Los ingresos más seguros en divisas en el país son los que entran por la actividad turística. Por ello se denomina al turismo la locomotora de la economía”, dijo el primer ministro Manuel Marrero Cruz.
Marrero Cruz señaló el impacto de la COVID-19 en el sector turístico nacional y expresó la necesidad de seguir diseñando nuevos productos a pesar de los contratiempos. “Nuestro país es un destino muy completo, empezando por su historia, el patrimonio y las riquezas naturales”.
El ministro de Turismo, García Granda, destacó que no solo se debe centrar la atención en los visitantes extranjeros, sino también en el turismo nacional. “No hemos reactivado los vuelos como quisiéramos, pero debemos buscar nuevos mercados emisores de visitantes, como los países de América Latina”, afirmó.
García Granda indicó que se espera superar los tres millones de visitantes en 2024, anticipando una recuperación en comparación con 2023, aunque el desafío sigue siendo la estabilidad en la calidad de los servicios.
Reconoció que, aunque este año no se han logrado todos los resultados previstos, se reabrieron polos que llevaban mucho tiempo cerrados. “Debemos lograr que todas las capacidades se queden en el territorio. Tenemos un patrimonio muy rico, pero hay que saberlo presentar al visitante”, dijo.
La diputada Mailín Luis Pérez de Morón, Ciego de Ávila, insistió en la identificación de atractivos locales, la capacitación de gobiernos locales y la articulación de ofertas hoteleras con un enfoque más cultural y patrimonial.
